Estrés, peleas, marcajes, camadas no deseadas, problemas de salud… existen muchas razones para plantearse usar métodos anticonceptivos para nuestros gatos.

 

El celo en los gatos es un proceso estacional que no tiene una frecuencia determinada ya que depende de su tamaño, raza, edad y de la temperatura y las horas de sol.

Las gatas pueden entrar en celo varias veces durante la misma época del año, habitualmente en primavera y verano, y ninguna durante los meses fríos. Los gatos reaccionarán cuando haya una gata en celo alrededor.

Durante el periodo del celo los gatos estarán más nerviosos, podrán maullar de forma intensa, intentarán escapar, puede haber peleas entre varios machos y marcajes con orina. Además, si nuestro gato sufre alguna enfermedad es posible que se vea afectada por el aumento del nivel de estrés.

 

 

Ante esta situación, es habitual plantearse recurrir a métodos anticonceptivos para gatos.

Por ello, en este post vamos a ver las formas que tenemos de controlar el celo en los gatos.

 

Tipos de métodos anticonceptivos para gatos

1.- Esterilización

La esterilización consiste en hacer una ligadura de trompas a las gatas y cortar las vías de esperma de los gatos de tal forma que no pueda darse un embarazo, pero seguirán teniendo el celo porque la carga hormonal se mantiene igual. Con esta operación, por lo tanto, no eliminaremos los problemas que hemos comentado anteriormente.

 

2.- Castración

Mediante la castración se extirpan los testículos en los machos y los ovarios y útero en las gatas por lo que además de evitar el embarazo también se eliminará el celo, ya que se reducirá el nivel hormonal.

 

 

3.- Castración química

Otra forma de evitar el celo en las gatas es mediante medicación, que puede suministrarse en píldoras o inyecciones.

Esta medicación modifica la carga hormonal evitando que las gatas puedan entrar en celo, pero no es una medida definitiva y debemos recordar administrar las dosis o podrán quedar embarazadas.

Además, en el caso de las pastillas, los vómitos o las diarreas pueden disminuir su eficacia si se dan justo tras las tomas, y si las mezclamos con comida debemos comprobar que no quedan restos (que nuestra gata ha tomado la dosis completa).

Por último, es importante considerar que la castración química tiene posibles efectos secundarios como el riesgo de piómetra (infección de útero), los tumores mamarios y la diabetes. Por ello, debe utilizarse de forma controlada por el veterinario y limitada.

 

¿Cuál es el método anticonceptivo más seguro y efectivo en gatos?

Tras analizar los tres métodos anticonceptivos para gatos, podemos concluir que la forma más eficaz y beneficiosa de evitar los celos y embarazos es la castración.

Este método anticonceptivo supondrá una intervención quirúrgica, pero es un proceso habitual que se hace a diario en las clínicas veterinarias y evitará el estrés del celo y el riesgo de embarazo.

La castración reduce además el riesgo de sufrir ciertos tipos de cáncer como el de próstata y testículos en gatos y el de mama y cuello de útero en gatas, así como las piómetras y los quistes en los ovarios.

 

 

Si estás decidido a utilizar algún método anticonceptivo con tu gato, acude a tu veterinario de confianza para que pueda informarte con mayor detalle sobre cada uno de ellos, sobre sus pros y sus contras, antes de tomar una decisión definitiva. Recuerda que nadie mejor que un profesional veterinario puede asesorarte y ayudarte a cuidar la salud de tus animales.

 

¿Has utilizado algún método anticonceptivo con tu gato? ¿Qué te llevó a tomar la decisión? ¡Cuéntanos tu experiencia en comentarios!