Ante un resfriado, la mejor arma es la prevención. Estando alerta ante determinadas situaciones y siguiendo estos consejos evitaremos que nuestro perro se resfríe.

 

Como bien sabéis, nuestro perro (como nosotros) también puede resfriarse.

Con los cambios de temperatura es cuando más susceptibles están ante el resfriado, por eso es de vital importancia prevenir estos cambios, ya que provocarán que las defensas de nuestro perro tengan que trabajar en exceso, pudiendo llegar a fallar.

 

Aunque los perros por lo general toleran bien el frío, siempre hay excepciones o situaciones que debemos tener en cuenta:

1.- Perros de complexión delgada: si el perro no tiene una capa de grasa, no le puede ayudar a hacer de barrera ante el frío.

2.- Los perros de tamaño pequeño suelen termorregular peor.

3.- Cachorros y perros ancianos: la inmunidad en el caso de los primeros se está construyendo y en el caso de los segundos, al ser mayores, sus defensas no funcionan igual.

 

 

4.- Vigilar especialmente a perros enfermos de alguna patología que pueda deprimir su sistema inmunitario.

5.- Especial cuidado cuando lo llevamos a hoteles caninos, guarderías o sitios con muchos perros: la correcta vacunación es muy importante en estos casos.

6.- La humedad también es perjudicial, así que será otro punto a controlar.

Si tu perro se encuentra en alguna situación de las anteriores, debes tener especial cuidado y es recomendable que le proporciones una protección extra en el caso de bajas temperaturas.

 

Si en casa tenemos una temperatura muy cálida, el cambio a la calle será mayor, así que si es tu caso, evita sacarlo muy pronto por la mañana o, en su defecto, abrígalo.

Especialmente en otoño, que empiezan a llegar las mañanas frías, y en invierno, que se registran las temperaturas más bajas del año, no olvides proteger a tu peludo.