Todos pensamos que los perros comen hierba porque necesitan purgarse. Sin embargo, los estudios publicados al respecto indican que los perros comen plantas por otras razones.

 

Una de las consultas más habituales que recibe un veterinario es “Mi perro come hierba cuando vamos al parque ¿por qué lo hace? ¿es malo?”.

Ingerir hierba o plantas en los paseos es habitual en algunos perros y, ante la incertidumbre de cuál pueda ser la razón por la que lo hacen, en este post queremos tratar sobre el tema para arrojar un poquito de luz sobre ello.

Frecuentemente se asocia la ingesta de hierba a que un perro está enfermo y la come para provocarse el vómito, o bien a que su dieta es deficitaria y debe equilibrarla comiendo hierba. Sin embargo, son muy pocos los estudios que existen sobre esta conducta y que han llegado a afirmaciones concluyentes.

 

 

En 2008 la Universidad de California publicó en “The Journal Applied Animal Behavior Science” el estudio más completo hasta el momento.

Esta investigación se desarrolló en varias fases: una fase inicial con 25 estudiantes de veterinaria que tenían perro, un nuevo estudio preliminar con 47 propietarios caninos y un estudio más amplio con 1571 propietarios. Su objetivo era probar si realmente los perros comen hierbas y plantas para purgarse ante un malestar gástrico o si lo hacen para complementar su dieta ante ciertas deficiencias nutricionales.

Ya en la fase preliminar del estudio, el 79% de los participantes manifestó haber visto a sus perros comer plantas, sobre todo hierba. Sin embargo, muy pocos mostraban signos de enfermedad y vomitaban tras su ingesta (fueron excluidos aquellos que tenían problemas gástricos y que, a causa del distrés, pudiesen ingerir hierbas para facilitar su vómito).

En la fase del estudio con la muestra más amplia, el 68% afirmó que su perro comía hierba con frecuencia, solo el 8% había observado signos de malestar en su perro tras la ingesta y un 22% afirmó que su perro vomitaba después de comerla.

 

 

Que los perros coman hierba es un comportamiento natural

La investigación de la Universidad de California concluyó que comer hierba es un comportamiento natural en los perros y no se debe a que padezca una enfermedad o que sienta molestia estomacal.

Además, tampoco se encontró evidencia de que los perros coman hierba para suplir deficiencias en su dieta, pues no existió diferencia en la motivación por comer hierbas y plantas entre aquellos que habían recibido suplementos vegetales en sus comidas y los que no.

 

 

Comer hierba es un comportamiento innato en los perros

Parece ser también que la ingesta de hierba es una conducta más común de lo que creemos, heredada de lobos, perros salvajes e incluso de ancestros comunes que lo solían hacer habitualmente.

El hecho de comer plantas está relacionado con su acción antiparasitaria, sobre todo para poner a raya los parásitos intestinales (nematodos). Un ejemplo lo encontramos en los chimpancés, que comen gran variedad de hojas para elevar la motilidad del tracto intestinal, haciendo que los parásitos queden envueltos y sea más fácil expulsarlos vía rectal o bucal.

Así, los cachorros son más propensos a comer hierba, pues tienen un sistema inmunitario más deficitario.

 

 

Los perros comen hierba por placer

Por otro lado, muchos autores proponen que los perros consumen plantas por puro placer. Identifican aquellas hierbas que les gustan y, una vez identificadas, las mordisquean una y otra vez disfrutando del momento. Seleccionan los brotes más jugosos y los olfatean, mastican y saborean.

 

Es por ello, amigos, que no hay que alarmarse si nuestros perros comen hierba o plantas, pero sí debemos tener en cuenta algunos aspectos:

1.- Especial atención a algunas plantas tóxicas que pueden ser perjudiciales para la salud de nuestro animal.

2.- Asegurarnos que las plantas ingeridas no hayan sido rociadas con productos fitosanitarios.

3.- Observar primero si nuestro perro busca ingerir hierba porque necesita expulsar un cuerpo extraño. En este caso la ingesta de hierba es perjudicial y agravará su malestar.

 

 

Por lo demás ¡Seguid disfrutando del paseo y que no os preocupe que vuestros perros pasten de vez en cuando!